El sentido de la vida no tiene sentido si se lo buscas.
Creo que es cuando no se está pendiente de si se tiene o no sentido, de si se hace o no se hace lo que se supone hay que hacer, cuando algo comienza a cuajar.
El sentido puede estar en cualquier parte, nunca donde nos dicen, normalmente alejado de donde nos indican.
Es versátil y no es universal, cada uno tiene uno: Lo que se desprecia por un lado puede ser lo que necesita otro.
El primer paso, quizá, para encontrarlo es aprender a saber que solo nos servirá a nosotros, a nadie más.
El segundo, puede que esté en comprender que está muy sepultado bajo todos los otros sentidos, los de los demás, los que nos quieren imponer.
Una vez encontrado, mejor atarlo fuerte, y tener el sentido de saber que no tendrá sentido para nadie más.
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