jueves, 1 de septiembre de 2016

Voluntades

Un intento tras otro. Una acción que lleva a otra. Un pensamiento que crea opciones. Una ilusión que marca caminos. Una esperanza que mueve voluntades. Un encuentro que cambia rutas. Una casualidad que no lo es tanto. Un destino que va incierto. Opciones que bifurcan. Bifurcaciones que llegan el mismo punto. Puntos que al unirlos no crean dibujos. Dibujos que al contemplarlos no dicen nada. Nada que no deja de ser nada. Días que se funden en años. Segundos rebeldes que nos graban sus recuerdos. Sueños que no duermen. Noches interminables que no merecen ser muertas por el día. Horas usadas que miran con recelo a las que esperan usarse. Momentos que mientras los vives sabes que se quedarán contigo siempre. Otros que desearías no haberlos visto jamás.
Lo único que junta eso es nuestra memoria, la consciencia de haberlo experimentado. Somos seres incorpóreos hasta que los recuerdos de cada instante nos llenan, entonces decidimos cómo vivir el siguiente. Eso somos. Voluntades del tiempo.

2 comentarios:

  1. Cierto.

    Por eso me niego a tirar mis diarios. Tal vez un día no sepa quien soy, ni donde dirigí mis pasos, ni por qué doblé en esa esquina o cerré tal puerta en vez de dejarla abierta. Entonces ellos serán mi memoria.
    O no. Tal vez entonces no me reconozca en esas páginas.
    Quizá el tiempo también las engulla a ellas.
    Probablemente...

    ANA_

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  2. Probablemente... la voluntad del tiempo tiene sus caprichos, los recuerdos nunca son lo que fueron ni somos los que fuimos...

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