martes, 30 de marzo de 2021

Ausencia

Vivir tu ausencia,
ese dolor anunciado
desde el primer encuentro.
Ese saber que todo acaba
porque empieza.
El espejismo que entre dos
nace para olvidar
que, aunque se desee,
el deseo no vence al deseo
de jamas vivir tu ausencia.

martes, 23 de marzo de 2021

Relato: Nannie

 

Asomada a la ventana ve cómo el sol se apaga. Malo. Ya es de noche y aún no ha llegado. Ojalá no venga. El papá que viene cuando todo está oscuro, no es su papá. El que entra de noche, trae las sombras a casa con él.
Con solo cuatro años conoce muy bien cómo reaccionar ante ese hombre que parece papá, pero no lo es. No comprendía por qué su olor, sus manos, su voz, cambiaban tanto, por qué gritaba. Aprendió a esconderse de él, porque no era él. No era su papá. Era ese señor que llegaba apestando que mami intentaba aplacar. 
Aprendió a reconocer la señal de la madre en los ojos desesperados y manos crispadas para irse a su cuarto, meterse debajo de la cama, bien agarrada a Nannie, su muñeca de cabellos de lana negra y ojos de botón reluciente. Y ahí, sobre el suelo frío, sudaba y tranquilizaba a Nannie, sin hablar, por miedo a que ese señor las encontrara. Si cerraba muy fuerte los ojos veía luces de colores y el tiempo pasaba antes.
Hasta que el miedo se le metió dentro para siempre, porque antes, cuando estaba papá, sabía que era imposible que el otro viniese. Pero ya no. Supo que papá era ese hombre malo, la tarde que dejó de tener cuatro años sin haber cumplido ni uno más. Desde esa tarde dejó de esperar a su papá para aprender a sobrevivir con el otro, el que cogió a Nannie, pensando que era ella, y la estampó contra la pared mientras gritaba que lo dejase en paz, que no lo mirase así, que no podía soportar sus ojos, esos ojos abiertos, confiados, de botones negros brillantes.

martes, 16 de marzo de 2021

Hacer

Intentamos dejar algo detrás de nosotros, una huella que perdure, un intento de que sirva, que lo que pensamos se materialice en ideas móviles, compartidas, como si así, trocitos nuestros se esparcieran y completaran, junto a otros, un trazo mayor.
Lo que somos es lo que hacemos, lo que pensamos podría convertirse en actos, por lo tanto, en nosotros.
Si pudiéramos lanzarnos al viento llegando a los cuatro puntos cardinales, sería como si cumpliéramos un poco con la necesidad que tenemos de trascender, de sentir que nuestra vida no es completamente irrelevante ni vacía. 
Si somos porque hacemos, mejor hacer algo con lo que somos.

martes, 9 de marzo de 2021

El silencio

El silencio es difícil de oír.
En la ciudad casi imposible, ni en las horas más entradas de la noche, donde los camiones de la basura van avanzando lentos, limpiando las calles del día, del ajetreo. O los pasos que resuenan con fuerza por el eco de la luna. O por algún que otro grito alcoholizado.
En la propia casa, el silencio está roto por miles de ruidos, crujidos, vecinos que se acuestan tarde, el disparador de la luz del rellano, el goteo de un grifo.
El campo, por mucho que se piense lo contrario, es aún más ruidoso; todos esos animales nocturnos que viven tan a gusto sin el sol, son de lo más escandalosos, y algo inquietantes: ese ulular, gruñido, croar o rascar esos pasos suaves, nerviosos, de algo que no ves pero sientes cerca.
Y el viento, el viento que se entretiene haciendo hablar a los árboles, día y noche, que silba y susurra entre las hojas, los huecos, los resquicios. 
Y lo que más escándalo hace: el propio silencio; que zumba con ese sonido suyo cuando nada viene a molestarlo y él mismo se anula.

martes, 2 de marzo de 2021

Depende

Unos días uno se siente invencible, otros vencido.
No se tiene muy claro por qué unos sí y otros no, pero pasa, varía el cómo vemos y sentimos las cosas, las pequeñas y las grandes. 
El enfoque se desenfoca, o enfoca tan bien, que duele de lo nítido. 
Es cómo las miramos lo que cambia, es evidente, ellas siguen igual, indiferentes a nuestra mirada. 
Aun así, sabiéndolo, comprendiendo que somos nosotros quienes ponemos voz a nuestras emociones, las dejamos mudas muchas veces.
Puedo que eso haga de nosotros unos invencibles vencidos. 
O unos vencidos invencibles, depende del día.