viernes, 18 de septiembre de 2009

Novedades

Es curioso como, a veces, ante un acontecimiento existen unas expectativas que sólo serán realidades al terminarlo.
Mientras no sucede, la imaginación lo modela, las posibilidades son infinitas y casi todo puede suceder, cuando estás metido de lleno en él, lo vas viviendo, fijándote atentamente en lo que está pasando, sumerigiéndote en lo que ya no es idea, sino realidad, y más tarde, al finalizar, quedan los recuerdos, lo que fue, y lo experimentado viene a visitarte una y otra vez, mientras lo cuentas a los amigos, y los instantes protagonizados vuelven a ti con una viveza, que puede que no tuvieran en su momento, pero que ahora, desde la memoria atas y calibras, viviendo de nuevo, lo andado.

Así que un viaje, un suceso, se vive, de manera distinta y todas especiales, en tres ocasiones; se planea imaginándolo, abierto a las miles de posibilidades blancas que tiene; se vive sin casi apenas darte cuenta, y se recuerda, una vez terminado, dando sentido a las tres.

2 comentarios:

  1. Lo tendré presente para el gran viaje que me espera. Por ahora estoy en la fase de la imaginación, mi preferida :)

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  2. Yo también estoy en la fase de la imaginación, y con mucha ilusión por pasar a la siguiente....

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